La ‘Ley Celaá’ o LOMLOE (Ley Orgánica de
Modificación de la LOE) ha sido aprobada con una mayoría absoluta mínima por el
Gobierno de España. Una ley que ha sido objeto de polémica y rechazo por parte
de una gran mayoría de la comunidad educativa: profesores, padres y alumnos de
los centros de enseñanza.
El presidente nacional
de CONTIGO, José Enrique Aguar, se ha mostrado muy crítico con la nueva ley ya
que “en lo que se refiere a la educación
concertada, se elimina cualquier posibilidad de demandas sociales para su
oferta. Es decir, según el dictamen, la autoridad competente gestionará a los
alumnos matriculados en centros públicos y privados. Este punto impide que las
familias tengan libertad de elección a la hora de matricular a sus hijos en los
colegios y escuelas valencianos. Además, otro punto polémico e importante es la
eliminación del castellano como lengua vehicular. Esto implica que las
administraciones educativas fijarán la proporción del uso de la lengua
castellana y la lengua cooficial como lengua vehicular, así como las materias
que deban ser impartidas en cada una de las comunidades en la que dos lenguas
convivan, como es el caso de Valencia.”
Por ello, desde
CONTIGO criticamos esta nueva ley porque, por un lado impide que los alumnos
sean matriculados en los centros en los que desean y, por otro lado, no garantiza el estudio de
la lengua española en cualquier parte ni permite a las familias que puedan
elegir libremente.
Esta es una ley
que no convence ni a padres ni a alumnos ni a docentes de los centros de
enseñanza valencianos. De este modo, desde CONTIGO insistimos en un pacto
educativo con todos los grupos políticos y una ley de consenso entre todos los
agentes que componen la educación en España.
